Un lugar para el karate deportivo, karate de dojo, arbitraje, entrenadores, atletas, historia, filosofía, técnicas , tradiciones y educación física .
Una de las metas más anheladas por cualquier karateka es obtener el cinturón negro. El practicante de karate por medio de su entrenamiento va ganando en destreza, pericia, control, experiencia, y esto le permite ir avanzando en el color del cinturón. El hecho de alcanzar el primer dan supone que el karateka ha conseguido un nivel de maestría y madurez en este arte marcial; pero, ¿está necesariamente listo para enseñar?
Si bien la práctica de karate lleva implícitas grandes dosis de pedagogía y didáctica, considero que el enseñar es una labor que no se les da a todos. El enseñar, ya sea karate do o canto, inglés o matemáticas, es un arte; Para enseñar es necesario contar con una preparación, y además poseer un perfil con ciertas características como responsabilidad, manejo de grupo, disciplina, facilidad de expresión, creatividad y recursividad.
Asegurar que todo cinturón negro está listo para enseñar karate, es casi como decir que todo buen futbolista puede ser director técnico
Vemos muchos deportistas que han logrado con méritos el ser cinturón negro, y son excelentes competidores, pero su desempeño no es igual cuando de enseñar se trata, y es que una cosa es ejecutar y otra explicar, y sobre todo hacer entender. Asegurar que todo cinturón negro está listo para enseñar karate, es casi como decir que todo buen futbolista puede ser director técnico. Sí, la experiencia ganada en los años de práctica sumará muchos puntos, pero no será suficiente.
Esta situación toma fuerza teniendo en cuenta que en la actualidad la práctica de karate y de varias artes marciales, está orientada hacia la competencia deportiva, dando prioridad a los resultados y dejando a un lado la marcialidad y la tradición. En muchos casos la clase de karate no busca tanto formar maestros, sino deportistas.
Muy seguramente cuando el entrenamiento de las artes marciales planteaba una formación integral, de cuerpo, mente y espíritu, cultivando valores y conductas relacionadas con comportamientos de un maestro, portar el cinturón negro podía significar estar calificado para enseñar. Desafortunadamente, en la actualidad no es ese nuestro caso.
Fuente original: http://www.clubkansei.com
Para comentar debe estar registrado.