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¿Cuánto tiempo llevas practicando/aprendiendo kárate? el arte de nuestros amores….sin embargo, pese al cinturón que poseas o al número de alumnos nacionales o internacionales que poseas, aun me atrevería a preguntar: pese a la cantidad de escuelas de kárate que tengas, gimnasios y similares ¿realmente sabes lo que es el kárate?
Como dice el periodista Salvador Erraiz en su libro, puedo asegurarte que ¡kárate es mucha más que un deporte!
Te presento una imagen mental: un tatami azul con rojo, dos participantes (aka y ao recientemente, aka y shiro para los que somos de antes) un árbitro y un par de espejos, ipon, wasari, yuko. Te parece conocido, dos tipos siendo extremadamente veloces, realizando, salvo magistralidades, un par de técnicas (mawashi o ura mawashi; gyaku zuki o mae te y algún que otro barrido) para tocarse ligeramente con sus guantes y marcar así un punto. Llevando protectores por todos lados aun cuando el contacto es ligero. Déjame decirte que eso apenas es karate, una sombra, silueta de lo que en la caverna de Platón los iniciados apenas vislumbran de una realidad superior que ahora trataré de plantear con mayor profundidad.
Quédate leyendo y entre estas líneas encontrarás una definición que va desde lo etimológico, pasando por lo alegórico y luego escalando hacia lo histórico y actual de lo que realmente es el karate como arte marcial.
El termino karate está compuesto de dos partes “Kara” y “Te”. Comencemos con “Kara”, que de una forma significa “vacío”, y es esa parte que corresponde a no usar armas, a determinar el karate como una forma de lucha sin armas, lo cual es cierto solo en parte como veremos más adelante. “Kara” también significa en otro ideograma, es decir otro símbolo gráfico conceptual, que por cierto es más antiguo, significa “chino”. Si a eso agregamos que “Te” significa mano, decimos que en Japón los maestros de Okinawa llamaron a su arte “karate”, primero con el significado de mano china, lo que hacía alusión al origen chino, de muchas de sus técnicas. Luego de cara a un conflicto político entre china y Japón y a la búsqueda de aperturar Japón al karate, se le dio el nombre de Karate, con significado de “mano vacía” con el cual adoptaba algo de honorabilidad: ¡Guau, ese arte te permite defenderte de alguien armado solo con tus manos vacías! Y a la vez recordaba el karate en sus orígenes, desde la indefensión de un pueblo sometido al capricho de los grandes.
Retrocedamos un poco más, cuando el karate en Okinawa era producto de la influencia cultural y de la desventaja del subyugado reino de las Ryukyu, dominado en dos ocasiones (la segunda definitivamente por el Japón por un lado y de una manera más diplomática por China continental. En síntesis un reino que en otrora fue independiente, debe de momento pagar tributo a China por un lado y a Japón por otro, sin que ni una, ni otro de los reinos que exigían tributo, peleara militarmente para que el otro no lo pidiera. Se forja un pueblo que se ve sometido por dos reinos mayores que él, que además les prohíben las armas convencionales en dos ocasiones y la idea de defenderse de gente mejor equipada y más grande se impregna en el pueblo de las ryukyu que forja el “Te” con un espíritu de desventaja que puede vencer a la parte aventajada. Así es como el karate que conocemos ahora se llamó al principio, solamente “mano”, “Te” de Okinawa u “OkinawaTe”. En este mismo momento, en el que el “Te” estaba solo dentro de Okinawa, que al recibir influencias técnicas y culturales tanto de Japón como de China, que algunas formas con influencia puramente chinas, pasan a denominarse como “ToTe”, donde “Te” sigue siendo mano, pero “To” hace referencia a la dinastía Tang de China, entonces podríamos decir que era como “mano de los de la dinastía Tang”. No quisiera dejar de mencionar aquí que el hecho de nombrar las artes pugilísticas como mano, también se hacía en china, donde “chuan” (Quan) de las formas de boxeo significa “puño” (hsing i chuan, taichichuan, chang chuan etc.).
En la enciclopedia del karate shotokai se dice que kara puede signficar desarmado o con manos vacias, pero también puede hacer referencia a la eliminación de todo pensamiento egoísta y perverso en la forja de una mente limpia y cita a Sensei Funakoshi al respecto cuando dice:
“De la misma manera que un espejo claro refleja sin distorsiones, o el tranquilo valle devuelve los sonidos, igualmente un estudiante de Karate-do debe liberarse de todo pensamiento egoísta y perverso, pues sólo con una conciencia y mente limpia, podrá él, o ella, comprender aquello que recibe. Este es otro significado del elemento kara en Karate”.
Por último para esta parte solamente etimológica, decir que estos términos son de cara a explicarlo en Japón, si seguimos dentro de Okinawa y antes de la primera expansión del karate; en lenguaje de las Ryukyu, los términos usados para estas artes marciales eran “Di” que era “mano” (equivalente a “Te”) y “Tou” que significaba “Tang”, es decir “Toudi” para designar las artes pugilísticas que tenían clara influencia china y “Uchinandi” para las artes marciales mas autóctonas, producto del legado generacional de las Ryukyu y de Japón. Aparece aquí un nuevo término “Uchinan” que significa Okinawa.
Sempatsu Shimabukuru, en una reunión de maestros en la que estuvieron además Miyagui, Hanashiro, Kiyoda, Shiroma y otros, aporta algo interesante a nuestro análisis de significados: “Aquí en Okinawa solíamos llama al karate Tii o Te, para diferenciarlo de de este, llamábamos TooDii o ToTe al karate que fue traído desde China”. Es decir hay karate chino y karate propio de Okinawa.
Alegóricamente y para descansar de tanto significado, podemos decir que el karate es como un iceberg que imponente flota por las aguas, enorme. El karate ahora esta pronto a ser olímpico, repito imponente flota por las aulas y aquellos que irán a las olimpiadas en la rama del karate serán los más grandes, serán los que han conquistado ese inmenso iceberg llamado karate y que sobresale grandioso sobre la superficie del mar. ¿Te has preguntado si ellos saben que debajo de eso que ellos y todo el mundo cree “grande” hay una porción enorme, una parte oculta del mismo iceberg (repito iceberg cuando en español es un tempano de hielo) si por debajo de la superficie del agua, oculto a la mirada del común, se encuentra aun mas grande esa parte del karate que podemos desconocer y aun podemos conocer pero que descuidamos para ser grandes en la cima del mismo? El tempano de hielo, por completo es el karate y dominarlo no es de una competencia es de toda la vida, si al caso.
Pasemos ahora a analizar la conceptualización que tienen algunos maestros y/o autores de lo que es el karate:
¿QUE DICEN LOS MAESTROS CLÁSICOS?
Itosu en 3 de sus preceptos presenta una idea práctica del karate, acercándonos a su concepto, consideren que aunque este maestro promovió la enseñanza del karate en las escuelas, aun tiene una visión interna del karate, es decir un karate (Te) de Okinawa. Dicen sus preceptos:
“El Karate no se practica solamente para tu propio beneficio; puede ser utilizado para proteger a tu familia o a tu maestro. No está ideado para ser utilizado contra un solo asaltante sino en lugar de eso como una forma de evitar ser herido utilizando las manos y los pies si en alguna ocasión tuviésemos que hacer frente a un villano o rufián.”
“El propósito del Karate es hacer los músculos y los huesos duros como la roca y utilizar las manos y piernas como lanzas. Si los niños empezaran a entrenar con naturalidad en la destreza militar mientras están en la escuela elemental, entonces serían idóneos para el servicio militar. Recuerden las palabras atribuidas al Duque de Wellington tras derrotar a Napoleón, “La batalla de hoy se ganó en los campos de juego de nuestras escuelas“.
“El Karate no puede aprenderse rápidamente. Como un toro que se mueve despacio, al final viaja mil leguas. Si uno entrena diligentemente durante una o dos horas cada día, en tres o cuatro años verá un cambio en su físico. Aquellos que entrenen de esta manera descubrirán los principios profundos del Karate.”
Tratando de interpretar estos preceptos podemos decir que el karate entonces se nos presenta como una forma de defensa personal, que permite defendernos a nosotros mismos y a los nuestros de uno o varios agresores, volviéndonos fuertes y estrategas en las artes militares, siempre y cuando se le dedique un entrenamiento constante y diligente, diariamente y al menso por 3 años. Destacando en esta definición el valor marcial del karate y no tanto al menos por ahora, el sentido espiritual. Que el pacifista considere el momento histórico del karate que arriba he señalado y el momento histórico de Okinawa.
El maestro Gichin Funakoshi, pionero de la salido del karate de Okinawa a Japón razona en su libro Karate do Kyohan sobre lo que es el karate y lo define como un arte marcial místico, milagroso y misterioso, dándole asi un toque inquietante al neófito; agrega que es una forma de lograr admirables hazañas, las cuales debemos contextualizar tanto en tiempo como en espacio:
“Defenderse sin necesidad de recurrir a las armas.
Romper varias tablas gruesas con el puño o las vigas del techo de una habitación con una patada.
Con la mano cual espada matar a un toro con un solo golpe o perforar el flanco de un caballo con su mano abierta. (¡pobres animalitos!!)
Cruzar una habitación agarrando las vigas del techo con sus dedos o estrujar el tallo de bambú verde con las manos.
Romper una roca suave también con las manos.”
A lo anterior agrega:
“Algunos consideran estos aspectos de este arte milagroso y misterioso para ser la esencia de Karate-do. Las hazañas son una pequeña parte del karate…..y es una pena pensar que Karate-do no tiene más que esto. De hecho, el verdadero Karate-do otorga peso a los asuntos espirituales más que a los físicos, como lo discutiremos. El verdadero Karate-do es esto: que en la vida diaria, la mente y el cuerpo están entrenados y desarrollados en un espíritu de humanidad; Absolutamente a la causa de la justicia.”
En lo último que además he dejado en cursiva resume lo que es el karate do, destaca acertadamente que quien pretende que la rapidez, la excelente patada (ura mawashi) que le permite ganar en los torneos o la medalla de oro olímpica que podrá tener, sean la maestría en karate; está equivocado y que si bien es parte de, no debería ser el todo de un arte marcial que es más profundo que meras habilidades físicas. Entenderíamos en síntesis que el karate es entrenamiento para la justicia y humanidad del individuo.
La visión del maestro Shigeru Egami Sensei en tiempo más reciente a Sensei Funakoshi, de quien fue alumno, es un poco distinta. En la enciclopedia de shotokai en línea; que dicho sea de paso es un excelente sitio con gran cantidad de recursos acerca del karate en ese estilo; se hace una descripción con interesantes elementos al respecto de lo cual he podido resaltar los siguientes:
La diferencia del karate jutsu y el karate do, este tema lo trataremos en otra entrada pero hace referencia al karate como técnica y al karate como filosofía.
La defensa personal con las manos vacías y la forja de armas corporales mediante el duro trabajo físico y mental.
El predominio del karate japonés sobre el karate chino.
La evolución del karate jutsu de Okinawa al karate do japonés, siguiendo los modelos del kendo y del judo que aparecen desde el kenjutsu y jujutsu.
El karate se convierte en una forma de desarrollo del poder interior y de búsqueda de la perfección del carácter desde el duro entrenamiento y no una forma de medirse deportivamente con el prójimo mediante competencias deportivas.
Miyagui define también karate en un escrito que en inglés seria como “Hitorical ouline of karate do, martial arts of Okinawa” y dice al respecto:
Que karate es el arte por medio del cual se ejercita mente y cuerpo para fines de salud, pero que sin embargo y de ser necesario, puede ser usado como forma de autodefensa con o sin armas. Destaca al igual que otros maestros las hazañas como algo de poca importancia y trivial del arte.
Para Shoshin Nagamine el arte del Te como él lo llama en su libro “la esencia del karate do de Okinawa, es en su origen como una forma de autodefensa y auto conservación, atribuyendo el origen del Te a la isla mayor del archipiélago RyuKyu, Okinawa. Añade que esta forma de autodefensa tiene su propia manera de hacer el puño, el puño exclusivo de Okinawa, por cierto ya olvidado por la modernidad y la tradición, un día escribo sobre eso. Entonces nos encontramos en Nagamine con un arte de autodefensa, que tiene su propia manera de cerrar el puño.
Masatoshi Nakayama en su libro karate superior dice: “Karate do es un arte de defensa personal sin armas en el cual los brazos y las piernas se entrenan sistemáticamente y un enemigo que ataque por sorpresa puede ser controlado mediante una utilización de la fuerza equivalente a la de emplear verdaderas armas.” Encontramos en esta autor una definición orientada a la defensa personal, otra vez y al uso del cuerpo y por consiguiente la preparación de este, como verdaderas armas, para enfrentar enemigos armados o no.
Luego de una visión del karate originaria según algunos de los maestros protagonistas no solo del mantenimiento sino de su evolución y desarrollo, hemos de pasar a una visión moderna del karate, conceptualizándolo desde la actualidad.
QUE DICEN LOS AUTORES A LA FECHA.
Francisco Diaz Portillo dice que “karate se desarrolló para la defensa personal en el contexto de una sociedad violenta. Con el paso del tiempo se ha convertido en una práctica deportiva, en un escape de las tensiones existentes en nuestra sociedad.” Agrega además que karate sigue a pesar de la modernidad ligado a su filosofía primigenia “la de una disciplina que enseña respeto, rigor, fuerza y espiritualidad. Como podemos observar esta definición inicia con la defensa personal como base, pero luego pasa a un karate de relax, para combatir el estrés de la vida diaria, como un desahogo al final de nuestras labores diarias y un deporte, dándonos un paseo por la modernidad de las artes marciales y esto de cara a la entrada del karate al olimpismo, queda como anillo al dedo. Después de esa concepción moderna, nos regresa al karate más japonés, hablando de la disciplina, respeto, espiritualidad.
Salvador Erraiz Embid, autos de un libro hermoso de artes marciales llamado “karate, mucho más que un deporte, habla de un karate donde la tradición este por encima del deporte y donde los valores primen sobre las habilidades físicas. En su artículo llamado también karate, mucho más que un deporte cita al maestro de su estilo: “El maestro Ohtsuka solía decir a su vez, y con esto termino, que… “el Karate debe tener como fin no solo el fortalecimiento del cuerpo sino también la formación del alma y del espíritu. El objetivo del Karate, es formar a la persona y hacerla capaz de contribuir a hacer una sociedad mejor.” Repito valores sobre habilidades, también en Sensei Ohtsuka.